Málaga

Málaga: Fusión de Playa, Cultura y Modernidad

Más allá de sus espléndidas 16 playas bañadas por el Mediterráneo, esta vibrante ciudad andaluza ofrece una vida cultural rica y variada. Cuna del genio Pablo Picasso, Málaga se ha revitalizado en los últimos años con la apertura de museos que satisfacen todos los gustos.

Si combinamos el atractivo del mar y la cultura con su ambiente animado, las generosas tapas de sus bares, barrios vanguardistas como el Soho, y zonas renovadas como el puerto, nos encontramos con una ciudad apasionante y llena de historia que todos querrían descubrir. No es casualidad que se diga que Málaga está más bonita que nunca.

 

Un Viaje en el Tiempo

Málaga está repleta de monumentos históricos, como la Alcazaba, una de las fortalezas árabes más imponentes de Andalucía, y el Castillo de Gibralfaro, que ofrece vistas incomparables de la ciudad. Al pie del castillo se encuentran el teatro romano y un pintoresco casco histórico perfecto para explorar. En este recorrido, te toparás con el Mercado de las Atarazanas, ideal para disfrutar de un vermú, y monumentos como la Catedral, conocida como “La Manquita” por su torre derecha inacabada. No puedes perderte la experiencia de subir a sus cubiertas.

Como ciudad natal de Picasso, Málaga alberga un museo dedicado al pintor en el centro, y también puedes visitar su casa natal.

 

Vanguardia y Cultura Contemporánea

Pero Málaga no vive solo de su historia. En años recientes, han surgido el Museo Carmen Thyssen, el único Centro Pompidou fuera de Francia con su emblemático cubo de colores, y la Colección del Museo Ruso de San Petersburgo.

Para quienes buscan una oferta cultural más alternativa, el Centro de Arte Contemporáneo no defrauda, con sus exposiciones de arte urbano en las fachadas y los innovadores locales del barrio del Soho.

 

Esencia Malagueña

Hay varias cosas que le dan a Málaga su toque único. Para empezar, más allá de monumentos, siempre conviene disfrutar de un día de sol en la mítica playa urbana de La Malagueta. Y el que quiera sumergirse de lleno en los sabores tradicionales, tiene que acercarse al barrio marinero de Pedregalejo y probar los típicos espetos de sardinas a la brasa.

Volviendo a La Malagueta, junto a ella está el Muelle 1, un paseo en el puerto lleno de tiendas y restaurantes por el que da gusto caminar al atardecer hasta llegar a la Farola, un faro que es todo un símbolo de la ciudad.

¿Otro emblema malagueño? Sin duda su calle peatonal Marqués de Larios, un animadísimo paseo decorado con flores y por donde hay que pasar al menos una vez en un viaje a Málaga. Por la noche, además, esta zona y sus calles aledañas se convierten en el lugar perfecto para ir de tapas en locales que son ya instituciones como la Bodega El Pimpi y probar a qué sabe un ajoblanco.

Málaga también es su Festival de Cine, su Semana Santa, sus restaurantes innovadores. Pero ante todo Málaga es alegría.